17 malditos años

Un viernes por la tarde, el 17 de julio de 1992, Bill dejó el trabajo pronto para pasar un fin de semana en su casa de retiro en el campo. Hacia las 1:45 pm, después de avanzar entre el tráfico durante unos 5 kilómetros, y a sólo 4 manzanas de su apartamento, un coche tomó una esquina de Morningside Park, le atropelló y se dio a la fuga,

Hoy hace 17 malditos años.

Bill iba patinando sin casco; mal hecho, llevad siempre un casco si vais en bici o en patines, pero sobre todo no seáis unos cabrones malnacidos: conducid con cuidado y si atropellais a alguien parad e intentad ayudadle.

Su hermano Mike cuida de él ahora. Dice que su mente es un caos y que parece haber perdido cualquier barrera de contención dificultando cualquier comunicación, pero que en sus ojos se puede ver el agradeciemiento ante las cartas de los fans y cualquier noticia de su agrado

Su hija Corinna se dedica a tareas sociales, algo que no es de extrañar conociendo la fuerte tendencia social de un padre que siempre firmaba con "Paz". Se sorprende de recibir, aun a estas alturas, numerosas cartas de gente a la que le apasionaron las historias de su padre, al que apenas tuvo ocasión de conocer.

Nosotros, sus admiradores, seguimos leyendo y releyendo sus historias. Encontrando escondidos en ellas nuevos detalles, nuevos títulos de canciones, nuevos poemas, nuevas onomatopeyas extrañas de las que le gustaban. Solo un par de meses antes del accidente hablo con Jackson Guice sobre la posibilidad de volver a escribir comics, de contar nuevas historias.

Seguimos aquí Bill, y estamos contigo.

Paz.

3 comentarios:

Uno de dos dijo...

¡Seguimos!
Yo voy en bici a todas partes y nunca olvido ese miedo. Pero no dejaré la bici.

[Me quedan veinte céntimos, como alguien ha corregido mi entrada anterior voy a ver si puedo borrar una letra de más que se te ha colado (hisotorias).]

Bruce dijo...

Me has puesto un nudo en la garganta... Gracias por el post y el recordatorio.

Mo Sweat dijo...

Ojalá existieran hoy en día más guionistas como Mantlo. Cada vez hay menos Mantlos, Thomas o Sterns, igual que cada vez hay menos Buscemas, Colans o Kirbys. Y es una pena.

Bill, gracias por toda tu obra... paz.

Interesante blog.